CONTROL INTERNO EN EL CULTIVO
Las malezas son una plaga dentro de los cafetales. Tienen una
gran capacidad de sobrevivir, resisten largos períodos de sequía, producen una
gran cantidad de semillas, se diseminan fácilmente y se adaptan a diversos
ambientes. De ahí la dificultad de tener un control adecuado de éstas.
El número de malezas que crecen en un cafetal es grande.
Compiten por agua, luz, espacio, nutrimentos y favorecen el desarrollo de otras
plagas como hongos, insectos y nematodos que causan daños al cafeto. Además,
dificultan las labores de cultivo y recolección del café.
Las malezas requieren un control adecuado y programado para
disminuir los daños al cultivo, no obstante, hay que tener en consideración que
un control excesivo de las malas hierbas traería como consecuencia grandes
pérdidas de suelo por efectos de la erosión. La eliminación total de las
malezas puede causar desequilibrios biológicos difíciles de predecir sus
consecuencias.
En la mayoría de los casos el control de malezas es exitoso,
rentable y conveniente si se integran todos los métodos de control. Debe
tenerse en cuenta que cuando se habla de control de malezas no se refiere
exclusivamente al uso de herbicidas como única alternativa. Existen otros
métodos que deben emplearse según las condiciones del cultivo. Integrar todos
los métodos es lo más eficiente, económico y menos dañino al ambiente.
Los primeros dos años de establecido un cafetal se consideran
críticos en el manejo de las malezas ya que se requiere de un control más
frecuente de éstas. Durante ese período pueden tomarse las medidas siguientes:
Evitar dejar al descubierto el suelo manteniendo las malezas
entre las calles a un nivel bajo pero limpiando el área de crecimiento de
raíces “corona o plato” del arbusto para reducir la competencia. Para desyerbar
entre las calles de cafetos puede hacerse con un machete o con un “trimmer”
teniendo cuidado de no causar daños a los tallos.
La siembra de cultivos intercalados como sombra temporera
ayudan en el control de yerbajos de dos maneras: proyectando sombra y
utilizando las hojas y tallos como mulla sobre la superficie del suelo. Esto
ayuda, además, a controlar la erosión disminuyendo la escorrentía y a retener
la humedad del suelo. Sirve, también, como materia orgánica y evita el impacto
directo de las gotas de lluvia sobre la superficie del suelo, compactando la
misma, lo que se traduce en una menor infiltración de agua a las capas de éste.
ü El establecimiento, uso y manejo de
sombra permanente puede ayudar en control de yerbajos.
ü Siembras de alta densidad poblacional
hasta un máximo que no ponga demasiada presión al suelo por agua y nutrimentos
es otra de las alternativas.
ü Las variedades semi-enanas
recomendadas por sus características de crecimiento son propias para estos
propósitos.
Métodos de control
Los métodos de control de malezas usados son el manual o
mecánico, biológico y químico, así como la combinación de éstos.
Manual o mecánico
En este método pueden usarse machetes o “trimmers” para
limpiar las áreas de la “corona o plato” y las malezas entre las hileras de
café. Es recomendable que queden los troncos de las malezas y el material
cortado sobre el terreno para que ayuden a controlar la erosión especialmente
en suelos inclinados y en épocas lluviosas. Generalmente se requieren tres
desyerbos durante el año; al inicio de la temporada de lluvias (primavera),
antes y después de la cosecha. El uso de machetes y “trimmers” es más adecuado
durante los períodos de alta precipitación.
Se aconseja no eliminar las malezas al ras del terreno,
excepto en el área de las “coronas”. Es preferible dejar franjas de malezas
entre las hileras de cafetos para proteger suelo de la erosión especialmente en
los primeros años de establecimiento del cafetal.
En algunos casos de
malezas como el rábano, bejuco de caro y otros será necesaria la remoción
manual.
Puede disponerse de éstos fuera del predio o colocarlos en
bolsas plásticas fuertes cerradas para que se descompongan.
Control Biológico
Puede hacerse utilizando plantas cobertoras de la familia de
las leguminosas preferiblemente o mediante el uso de sombra temporera o
permanente. Las plantas que se usarán deben dominar las malezas y ser de
especies no trepadoras. El uso de cobertoras requiere del control de la altura
de las plantas y de la limpieza de “coronas”. La sombra requiere de regulación
y manejo. Este método es trabajoso y costoso inicialmente, pero a largo plazo
podría resultar en uno económico.
En algunas fincas de la región cafetalera se han usado
animales como las ovejas para controlar las malezas. En este caso es necesario
construir varios cercados para rotarlas de predio. Si no se hace esto se el
riesgo de que cuando las malezas escaseen ataquen el cultivo.
Control Químico
Se utiliza una sustancia química sintética conocida como
herbicida con poder destructivo sobre las malezas. Su uso está forzado por la
disponibilidad de mano de obra y los costos de control. Este método debe
emplearse cuando el cafetal está muy invadido de malas hierbas. Requiere del
uso de equipos de aplicación y personal adiestrado en el uso del producto, su
aplicación, manejo y precauciones. Debe evitarse la contaminación a seres
humanos, animales, plantas de cultivo, cuerpos de agua y el ambiente en
general.
El control químico debe alternarse y combinarse con los demás
métodos de control. El agricultor debe tener conocimiento del tipo de malezas
presentes para hacer una selección adecuada del herbicida que se usará.
Para evitar los excesos de contaminación con herbicidas,
utilice las dosis recomendadas y el equipo adecuado. Lea cuidadosamente las
instrucciones y direcciones en la etiqueta del producto. Tenga en consideración
la temperatura del ambiente, las lluvias, la humedad relativa, los vientos y la
etapa de crecimiento de los yerbajos para mayor eficiencia del producto.